La hija de la bailarina rusa
nace y es un poco de Vova Pezlotroska. Una niña rusa, nacida en una granja destartalada llena de
rotos en las paredes, corrientes de aire y teteras descascarilladas. Así es
como se despertó en Vova su amor por todo lo roto, lo caótico y lo que a veces
parece tener poco significado.
La hija de la bailarina rusa
es un mundo infinito de imaginación, es una evocación a los recuerdos mas
pequeños de la niñez, es sin duda poder volar en momentos difíciles.
Su creadora, Victoria. Una
mujer especial, que a través de los ojos de Vova Pezlotroska realiza unas maravillosas
ilustraciones basadas en sus recuerdos y en su infancia en Rusia.
El mundo de La hija de la
bailarina rusa es infinito, pequeños cuadernos de notas, acuarelas para decorar
habitaciones, recordatorios, agendas, camisetas……un sin fin de bailarinas que
llenarán de ilusión y de magia nuestro día a día.